En las obras de los autores noveles se repiten con cierta frecuencia unos patrones de diseño o de presentación y desarrollo de los personajes que delatan a estos como ‘personajes noveles’.
Por suerte, la mayoría de los fallos de diseño o de desarrollo son subsanables de una manera sencilla y asequible al más perezoso y desentendido de los escritores.
Aquí van
5 cosas que delatan a los ‘personajes noveles’:
- Los personajes noveles dan explicaciones sin que se las pidan, a veces en forma de respuestas que nada tienen que ver con las preguntas que otro personaje les hace, solo porque son necesarias para el avance de la trama. Nada más fácil que poner en boca del otro personaje las preguntas correctas, además, claro está, de que esas preguntas se integren con naturalidad en el diálogo.
- Los personajes noveles saben qué es lo siguiente que tiene que decir el personaje con quien mantiene un diálogo y le hace el favor de darle el pie. Una forma habitual de este fallo es cuando el personaje novel anticipa su reacción a algo que todavía no ha ocurrido pero va a ocurrir. Como por ejemplo mostrarse asustado o alegre por algo que todavía no ha ocurrido, ni sabe, ni siquiera sospecha.
- Los personajes noveles hacen o dicen cosas «sin pensar» o «sin saber por qué». Esto se da cuando la única explicación posible a esas palabras o acciones de los personajes son las necesidades del guion que el autor tiene en la cabeza. La forma es más o menos así: «Sin saber por qué, Antonio se guardó en el bolsillo aquella fotografía» (que hacía años que tenía encima de la mesilla, y se la guarda con marco y con todo). Si Antonio no sabe por qué se la guardó, será el lector quien no tarde en descubrirlo y, por lo común, con malas consecuencias para el autor.
- Los personajes noveles conocen perfectamente las necesidades del narrador y le ayudan explicando con todo detalle al lector qué piensan o por qué actúan así los demás personajes o incluso ellos mismos. Una variante muy interesante es cuando los personajes noveles se sientan junto a otro personaje a contarle su vida sin venir a cuento solo para ser amable con el narrador y ahorrarle trabajo.
- Los personajes noveles no hablan de forma natural, sino que toman prestado el lenguaje de otros entornos, como por ejemplo los medios de comunicación o, peor aún, escritos ensayísticos o académicos, lo que los hace pasar por auténticos pedantes a quienes el lector se puede ver abocado irremediablemente a odiar. Un caso frecuente es cuando el personaje dice frases de este estilo: «Le he preguntado al comisario de policía por lo sucedido y se ha mostrado reacio a hacer declaraciones». A menos que ese personaje sea periodista, ejerza como tal y esté trabajando en el momento de decirlo, lo más probable es que no le quede bien hablar así. Y a veces, ni siquiera es necesario que el lenguaje sea demasiado rebuscado ni complejo, basta una forma especial de decir las cosas poner en evidencia a los personajes noveles. Un caso especial de esta falta de naturalidad en los personajes noveles es cuando de su diálogo solo se puede deducir que siempre quisieron ser poetas… pero nunca lo consiguieron.
5 cosas que delatan a los ‘personajes noveles’
© Víctor J. Sanz
Qué bueno Víctor, me río con tu ironía pero es tan cierto. Terminé de leer el libro de Howard Mittelmark y Sandra Newman (Cómo no escribir una novela) y me he partido de risa, teniendo en cuenta que cometemos errores de este tipo sin saberlo hasta que nos lo recuerdan. Y lo que es peor, siendo Profesora de Literatura Inglesa, recuerdo haber enseñado tanto de esto a algunos de mis alumnos (en inglés obviamente). El tiempo pasó, y parece que me hubieran cascoteado la memoria ;-).
Muchas gracias,
Un gran saludo como siempre.
Hola, Poli:
Qué bueno leerte por aquí.
El libro de Mittelmark y Newman es fantástico, imprescindible.
Muchas gracias por la visita y la aportación.
Saludos.
Me he reído mucho, la imagen de Antonio guardándose la fotografía en el bolsillo me acompañará hasta que se me olvide, como poco. Es la mejor forma de aprender los conceptos que quieres transmitirnos. Enhorabuena.
Hola, Paco:
Muchas gracias como siempre por tu intervención.
Enhorabuena para mí por los lectores que tengo.
Un abrazo.
Hola Víctor:
Soy el autodidacta ( el enteradillo ja,ja,ja,)no me hagas caso, que me rió hasta de mi sombra. He tomado nota de todo.
Los cuentos y los micro-relatos, son un mundo aparte y distintos a la hora de crear obras. La novela autobiográfica al ser hechos reales, si son interesantes solo hay que enriquecerlos con algo de ficción para hacerlos mejores de lo que son y contar las cosas sin enrrollarte y crear una lectura fluida. Estoy de acuerdo contigo en esos 5 puntos en los que el lector puede llegar aburrirse o ver detalles mediocres en la lectura. Cuando escribí «Julia» ( novela negra-intriga) procure crear suspense desde el primer momento. Mi deseo es transmitir incertidumbre, dudas e intriga a base de complicar la trama, introduciendo nuevos elementos para mantener al lector enganchado y que no se aburra. Creo que si puedes atar después bien todos los elementos y proporcionar un final inesperado, que ademas complazca al lector, has logrado tus propósitos y expectativas. Como tu dijiste en otro articulo el secreto esta en dejarlo en un cajón que repose. El cerebro siempre esta trabajando y te va dando respuestas, proporcionándote cambios y dándote caminos a seguir que harán que veas lo que sobra, la que falta y lo que hay que cambiar cuando lo vuelvas a leer.
Me gusta mucho leer artículos explicativos con calidad como el tuyo, son de un gran valor para mi. Tambien me gusta como veras comentar lo que hago, para reafirmarme, para que me rectifiquen y para aprender escribiendo pues de las «cinco memorias» es la que mejor que tengo y mas le gusta a mi cerebro para hacer suya. (Cuando escribía chuletas de joven, luego no necesitaba sacarlas porque las recordaba a la perfección,,ja.ja,ja, ja )
UN SALUDO Y GRACIAS POR TODO.
Muy interesante, Jordi.
Creo que será bueno que sigamos viéndonos por aquí.
Saludos y gracias por la visita y por participar en este espacio.
¡Que tal! Creo que es difícil hacer un buen personaje, y luego hacer otros que no se les parezcan. Un día de estos haré un personaje con defectos como yo 🙂
Creo que mis personajes dan muchas explicaciones =( pero no me gusta ver una película donde no digan como funcionan las cosas en su universo.
Por ejemplo ¿Por que Thor es el único que puede levantar su mazo? no me es suficiente que me digan que por que es «digno». Quiero una respuesta detallada del mismo personaje de forma científica. ¿es mucho pedir? creo que sí. Por eso creo que mis personajes explican demasiado.
Saludos.
Hola, Daniel:
Interesante cuestión, sin duda. Es cierto que a veces encontramos historias en las que no se explica ni siquiera lo que resulta obligado para entender el mundo y las circunstancias en las que se desarrolla el relato. Otras veces, en cambio, los personajes centran el protagonismo en el cómo más que en el qué. Yo creo que, como en muchas otras situaciones, la virtud está en el término medio. Así que, explicaciones, sí, pero las necesarias.
Saludos.